jueves, 20 de abril de 2017

Sobre qué es sentirse sola


  1. Sentirse sola no es sólo una sensación de necesitar a alguien, es una sensación de sentirse insatisfecha y frustrada. Sentirse sola en los proyectos, en las metas, sola en los anhelos, es sentirse sola de una respuesta, no saber a quien referirse, no saber con quién se cuenta o con quien no. Sentirse sola es un impulso ilógico por querer encontrar una meta donde no la hay. Una estructura en lo inestable. 
  2. Me siento sola, llena de soledad. No hay un eco, sólo mi voz.

jueves, 10 de noviembre de 2016

De arañas, magia y gigantes

Tomás Saraceno-50 años de escultura hiperrealista- Toujours el museo
 como testigo.




"Una chica maga como testigo"

Jue, noviembre 15

                                                                                           Julisa Contreras Ruiz 

Hace nueve días, fui a ver varias exposiciones al MARCO en el centro de Monterrey, apenas terminé de desayunar-comer me fui para allá, eran ya como las tres de la tarde, debo agregar que iba sin mucho entusiasmo, últimamente me he topado con muchas exposiciones sin nada notable que agregar al respecto o con una idea sobre el arte demasiado post-moderno que nada tiene  que ver con la creación de un concepto real sino con una manera de forzar unos burdos intentos y "transformarlos" en arte.

La entrada vale ochenta pesos, algo elevado para el país pero dicen que valdrá la pena, ya había entrado antes pero me pareció como nunca haber entrado. Por desgracia a la entrada de la primera exposición que justo era la que más motivaba mi atención "50 años de escultura Hiperrealista" estaba escrito que cero foto y video debido a que esto era prohibido por los derechos de autor, lo que hace que mis descripciones deban ser mejores pues la foto, que es un gran elemento de descripción no me es posible adjuntar (sin embargo al final subiré capturas de pantalla de un video que grabé en secreto)

 Entrar ahí fue algo fuera de serie, dado a que lo que yo a lo lejos vi como a un señor que me miraba fijamente y custodiaba como un policía, a su vez que notaba una chica triste o algo parecido que estaba recargada sobre la pared, cubriendo su rostro y algunas personas más a lo lejos, y después sorpresivamente notar que era sólo  yo y otra persona "real" dentro de aquel recinto, los demás eran arte, el señor que parecía vigilarte era arte, la joven asustada era arte, los hombres con escalera y ropa de hippies ochenteros también eran arte. Vi parada como una venus de Milo a una bella mujer desnuda, al acercarme noté las pequitas, marcas y arrugas que le daban realismo a su cuerpo. En el cuarto contiguo se encontraban varias mujeres que en realidad representaban a una misma mujer en diferentes facetas y gestos, también desnudas, una mostrando su sexo, otra con las piernas más juntas y volteando hacia otro lado.







En el cuarto al lado de las mujeres pensativas estaban otras esculturas igualmente dulces, pero diferentes, eran más bien como cuerpos que aparentaban ser plastilina, estaba una mujer embarazada con un vientre hinchado y rojo y zapatos como de muñeca, en la exposición había muchas figuras notables, una mujer alta y esbelta con look como de revista pin-up,  como suerte de astronauta. 

Habia rostros enormes que reflejaban un amor por el gigantismo, hombres y mujeres enormes y alarmantes y a su vez hombres pequeños y adorables como pequeños gnomos. Mujeres y hombres pasados por los signos de la modernidad, rostros alargados como tomados por una mala cámara, hombres con cara curva. Bebés en brazos de ancianas.




 Una joya que recorrí dos veces y media para después pasar a un bodrio, una sala que lo mejor que tuvo fue un letrero hermoso que decía Toujours, una foto pintada por encima de Ian curtis y la frase "Se vende viento" en francés en tres paredes On Vend Du Vent que es preciosa la referencia a una frase del siglo 18 sobre la venta de viento que realizaban algunos comerciantes, vender el viento de francia es algo adorable pero no para una exposición de arte. No hay mucho que comentar sobre esta exposición más que el hecho de que era colorida.






Finalmente llegó la magia, si bien la precisión de los primeros artistas fue algo precioso y fue notar que la perfección y humanización de las cosas está más bien en la imperfección entrar a la obra de Tomás Saraceno fue como nadar, por eso menciono: el entrar.

La primera sala era negra que fue intercalada despues por otras tres más: una blanca otra negra y una blanca era genial el contraste de ambientes  que lograba. El también aracnólogo y arquitecto es un artista de los momentos, del concepto.


Entrabas en la magia literalmente, una sala totalmente negra sólo iluminada por la luz que reflejaba sobre las telarañas y una música casi atmosférica hecha sólo por el ruido de las telarañas al moverse sobre un micrófono potente, observar los cosmos curvos que creaban las arañas era algo poderoso, observar que la magia del espacio está en todos lados, observar esa simetría,  esa perfección era algo inusitado, todo estaba ahí en las telarañas. Si algún día se llega a saber el origen de todo, será por las arañas, por sus creaciones. Por cierto, ahi se encontraba una trabajando, en vivo, creando arte.


En la segunda sala todo era aire, esferas gigantes y el espacio blanco e inmenso, los videos que hablaban sobre la inmensidad del espacio del aire y lo barato que sería con su idea viajar.


El tercer cuarto era una vista a un lago que hacia relación a un vistazo al universo, era una experiencia identica al espacio pero era sólo una vista al lago de noche, lo que juega con la misma idea de las telarañas y lo que el universo complejo y completo en sí mismo es una multireproducción en diferentes lugares.

Cuarto negro.

El cuarto blanco, un cuarto inmenso donde había que pasar por telarañas hechas con estambre negro, enormes telarañas humanas.

Casi me quedo ahí. Ya eran las seis cuando me habla un chico de seguridad, era hora de irme aunque mis sentidos estuvieran extasiados había que irse. 

martes, 1 de noviembre de 2016

Sobre las dificultades que emprenden los que aman en este siglo


 Amar es entre todos los sentimientos del alma, el que más se parece a la eternidad, el que más nos acerca a ella. ”   


José  Vasconcelos 









Por: Julisa Contreras 


En estos tiempos todos se empeñan en hacerte creer que el amor no exivste, te hacen atarte a la rutina de que tener sexo con alguien que apenas conoces es más estable que una relación. Te dicen que el valor de una persona está en su apariencia, y si esas personas encuentran el amor,  te dicen que siempre hay un reemplazo.
Yo he amado, he amado hasta sentir que no pueden salirme más lágrimas,  he amado hasta aprenderme más de 50 diferentes boleros, he cantado demasiadas canciones y poemas, he llorado por cada uno de los cientos de personajes que han amado en los libros que leo, porque si de algo se justifica la vida, así tan dolorosa, tan dolida y a veces tan carente de tanto, es del  amor.
El problema está en que a veces me siento consternada, triste, como si cada día se me muriera un poquito el cuerpo,  la mente. Me he dado cuenta que he escuchado esos consejos, me he alejado del amor, del sentido. Pero también es cierto que uno no ama tantísimo tan fácil, a veces recuerdo con una nostalgia dulce sentir tristeza, como si estuviera perdiendome de algo que me aconteciera.
Yo no puedo contra este tiempo del olvido, no puedo con no decirle a mis amigos cuánto los quiero, con saber que hacen a cada momento, con sentirme en contacto tan profundo con ellos que siento tenerlos abrazados.  Quiero abrazar a mis amigos, a la gente callada y tímida por la calle, a esas personas que se sienten lejanas y a esas otras personas como yo que no tienen ganas de habla por celular, sino de tomar una mano, y amar.


Mar,1 Nov, 2016.